COMO LAS ESTRELLAS, RECHAZANDO PAPELES
Jo, que rabia. Ayer me llamaron para rodar un corto en Madrid el 27,28 y 29 de marzo y les dije que consultaría a mi médico para ver cómo iba a andar con mi hombro (andar es una manera de hablar. Bueno, no de hablar. Andar es como una manera coloquial de...) Les dije que consultaría a mi médico para ver cómo iba a estar mi hombro para esas fechas (así mejor) y les contestaría. Era optimista porque el corto no era de acción y creo que iba a hacer de locutor de radio o algo así. Así que esta mañana me he ido a la clínica para asaltarle a mi médico al salir del quirófano. Consejo: No asaltéis nunca a un médico al salir de un quirófano porque no llevan pasta.
Bueno, pues el caso es que le expongo el caso y me ha hecho caso. Pero me ha dicho que después de la operación me tendré que pegar ¡TRES SEMANAS! con el brazo en cabestrillo, totalmente pegado al tronco del tronco que os escribe. ¡Estoy más contento!
Aún tengo mis dudas, pero les voy a llamar para decirles que no puedo. No precisamente por estar así, porque un locutor podría locutar perfectamente con el brazo en cabestrillo, pero el problema va a ser valerme por mi mismo esos 3 o 4 días por los madriles, empezando por el vestirme y desvestirme. Porque no voy a estar todos esos días en pelotas o sin cambiarme de ropa. Eso no. Me lo estoy pensando, pero creo que les voy a decir que no.
¿Lo bueno? Si hay que decir algo, pues que ya parezco una estrella, rechazando guiones porque me sale de los cojones. ¡Los cojones! Sigan mandando guiones que en cuanto me quiten el cabestrillo volveré a ser actorcillo. O intentarlo.
Seguiré infiltrando.
P.D.: El de la foto no soy yo. Aún.